Insisto


Puede que alguna vez volvamos,
y al mirarnos,
un instante,
acortemos las ausencias.
Hay razones para no intentarlo,
alejarnos del fuego,
huir de inviernos pegados.
Es hora de lavar los cuerpos,
ocultos de disculpas,
desangradas en este altar de ofrendas
al que hemos venido a rezar los últimos años.
Nos hemos vuelto invisibles,
el uno para el otro,
nos ignoramos en lo deseos reprimidos,
y a la vuelta,
lejanos de palabras,
los secretos más largos son bienvenidos.
No añoro,
ni defiendo,
en este no estar opaco,
de tolerancias acumuladas.
Cuando las intenciones no se tocan,
ni lo siento es disculpa,
mejor borrar los arrullos,
y abandonarnos,
aunque sea con silencios.-

1 comentario:

Jose F. Arillo dijo...

Siempre me gustó tu lado poético...
cuando una introducción a un programa se convertía en un placer para el oido.
Siempre admiré tu forma de convertir las cosas más cotidianas en poesía. Sigue así.
Me alegra haber reencontrado a ese Vicente con el que durante unos años compartí mis días.
Un abrazo. Amigo.